Bienvenidos al plato fuerte de la predicación. Todo los pasos previos pudieron ser excelentes, los mejores de toda la historia, pero si no pueden desarrollar los puntos principales, es decir, los subpuntos, entonces están fritos. Este es el corazón del sermón, el que lleva la explicación y la aplicación del sermón a la vida diaria. Si no se explica, expone o presenta el punto principal de una manera clara y realísticamente comprobable en la vida diaria, su sermón será un bonito discurso, pero no una prédica. El objetivo final de todo sermón es comunicar el mensaje de Dios, y que al salir de escucharlo, el oyente esté motivado a practicar la Palabra que ha penetrado en su mente y corazón, y le ayude por medio de El Espíritu Santo a encontrarse dentro de la Voluntad de Dios.
Este paso, en tiempo, es el que mayor demanda provoca en la realización del sermón, pues tendrá que desarrollar cada punto principal, tres, cuatro o hasta cinco ideas similares con un objetivo definido desde el título. Algunos tienden a utilizar ilustraciones para llenar los subpuntos, pero estos no son suficientes. Lo que se necesita es un plan para obtener los subpuntos de un pasaje, y estos ser relacionarán sistemáticamente con la exposición y la aplicación. Es de preguntarse si todos los subpuntos salen de la porción que se estudia. No todos, lo veremos en los párrafos siguientes.
Hay por lo menos seis maneras de obtener los subpuntos, haciendo la aclaración que no siempre se podrán aplicar las seis al mismo tiempo, en algunos casos usará la 1, 2, 3 y 6; en otros sólo los 2, 5 y 6. Pero al final, la aplicación y descarte de una de estas seis maneras se realizará por cada punto principal a desarrollar.
Los subpuntos son necesarios en un sermón por que explican y aplican un punto principal. Los puntos principales necesitan ser ampliados. Es cierto que el punto principal expone una verdad eterna y universal de Dios, pero nada más eso, no explica la verdad en sí, o cómo afecta en la vida diaria de las personas, o cómo se aplica a sus necesidades y su caminar con Dios. Es en este terreno que los subpuntos amplían el punto principal. Su función es explicar y aplicar la verdad que está presente en el punto principal.
1. Obtener el subpunto a base de explicar una palabra o frase clave usada en la formulación del punto principal.
Es frecuente que un punto principal contenga una palabra o frase clave, como en el siguiente ejemplo:
- I. La gente tiene que arrepentirse porque el reino de los cielos se ha acercado (Mateo 3:2). Esto es una verdad irrefutable para el creyente, pero los oyentes necesitan saber lo que significa la idea del "arrepentimiento". No podemos dar por sentado que saben el significado bíblico del término "arrepentimiento". Este es un concepto importante. La Biblia nos enseña que hay arrepentimiento real y falso (2 Corintios 7:9-11). Los oyentes necesitarán que les explique esta palabra clave de la Biblia.
La explicación del significado del "arrepentimiento" de Mateo 3:1-12, es básica para que los oyentes comprendan el pasaje, y a veces, el sermón mismo. Es aquí donde se aplica el subpunto. Veamos algunos ejemplos de palabras clave que en un momento de sus predicaciones ha sido o será necesario explicar:
- Adopción.
- Perdón.
- Fe.
- Gracia.
- Santidad.
- Justificación.
- Vida eterna.
- Paz.
- Pecado.
- Salvación.
- Adoración.
Se pueden añadir muchas palabras, y es necesario poder tener al alcance muchas herramientas para poder exponer y explicar adecuadamente, y con sana doctrina estas palabras claves, y a continuación les sugiero los comentarios bíblicos, así como los diccionarios de la biblia para poder ahondar en estas palabras claves.
Les dejo hasta la próxima entrega, donde veremos la manera siguiente de obtener los subpuntos. Sus opiniones en los comentarios. Y si les fuera posible agregar enlaces de libros en línea que ayuden a otros a facilitar la interpretación y exposición de estas palabras claves y otras, sería de mucha utilidad. Dios les bendiga, hasta pronto. Algunas ayudas a continuación:
Estoy muy feliz de la facilidad con la que coy aprendiendo, Se que hay muchas personas que como yo pensaron que predicar era tan complicado, a causa de haber leído libros poco explicativos, Dr. Navas realmente oro que Dios me lo Bendiga mucho
ResponderEliminarGracias hermana Isabel, gracias por sus oraciones, y siempre espero poder ser de apoyo para todo aquel que, como usted, muestra una pasión por predicar un auténtico sermón bíblico.
ResponderEliminarBendiciones.