[título = tema + ¿por qué?]


¿Una fórmula? Sí. Para los que ya empezaron a lamentarse por ser tan malos en matemáticas y álgebra, y tuvieron que dedicarse a otra cosa, no se preocupen, no es tan complicado. Ahora bien, puede ser una ecuación, pero el resultado será producto de relación diaria con Dios. Estas son el tipo de formulaciones que dependen de un factor importante. Así como la velocidad de caída de un objeto es constante debido a la gravedad, estas "fórmulas" son el producto de un común denominador, Dios actuando a través de usted.

El ¿por qué?. Al añadir al tema la interrogación "POR QUÉ" lo que se obtiene inmediatamente es un título. Muchas de las porciones que encontramos en la Palabra de Dios encuentran su dirección en contestar esta pregunta, en dar su respuesta a las cuestiones de la vida que nos hacen formularnos esta pregunta, ¿por qué?.

El por qué es sinónimo de 'la necesidad de' y `razones'. por ejemplo "Razones por las que debemos orar", "¿Por qué debemos orar?", "La necesidad de orar". Veamos otro ejemplo extraído de la Palabra. Hebreos 11:1-6.

1 Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. 2 Porque por ella alcanzaron buen testimonio los antiguos. 3 Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía. 4 Por la fe Abel ofreció a Dios más excelente sacrificio que Caín, por lo cual alcanzó testimonio de que era justo, dando Dios testimonio de sus ofrendas; y muerto, aún habla por ella. 5 Por la fe Enoc fue traspuesto para no ver muerte, y no fue hallado, porque lo traspuso Dios; y antes que fuese traspuesto, tuvo testimonio de haber agradado a Dios. 6 Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan. (VRV60).

El tema del que habla este capítulo tan famoso es "La Fe", y estos primeros versículos tratan un aspecto más específico de la fe, nos explica "el por qué de la fe". Su título sería así, "Por qué es necesaria la fe". Desarrollemos la idea a continuación.
  • TEMA: La fe.
  • TITULO: ¿Por qué es necesaria la fe?
  • PUNTOS PRINCIPALES.
  • 1). La fe es necesaria para alcanzar buen testimonio (v. 2).
  • 2). La fe es necesaria para entender la Palabra de Dios (v. 3).
  • 3). La fe es necesaria para ofrecer sacrificios con excelencia a Dios (v. 4).
  • 4). La fe es necesaria para agradar a Dios (v. 5, 6).
Continuaremos en la próxima con otros ejemplos para que quede completa esta parte del tema, y les dejo la formulación del tema y el por qué.

TITULO = TEMA (LA FE) + POR QUÉ (POR QUÉ ES NECESARIA)

Espero sus comentarios bajo este artículo lección. Bendiciones a todos. Nos vemos en la próxima.

[el título]


Ahora veremos la diferencia entre el tema y el título. Uno de los lectores del blog me envió días a atrás un correo electrónico, donde expresaba correctamente la intención de las porciones en tarea sobre el tema. Pero le contesté con el comentario que a continuación hago. Hay una corriente de pensamiento acerca de "el tema" y "el título", los cuales son indiferentes en el desarrollo del sermón. Este pensamiento ha sido difundido mucho en el libro del hermano Samuel Vila, 'escalera de la predicación'. No estoy en contra, mucho menos criticándolo, pero no estoy de acuerdo a su perspectiva en cuanto a este punto (mi maestro de homilética en el instituto tampoco). ¿Por qué? veamos. Esto es lo que tratamos en "El Tema" sobre sus características: Aquel aspecto extenso y general de la verdad, que proporciona las ideas y el contenido de los sermones. Al contrario de lo que el título del sermón es: Es una idea clave que ha sido escogida entre las diversas ideas claves que contiene un tema. Esto le confiere una diferencia abismal con el tema del sermón, pero que complementa el hilo de pensamiento de la porción. Este es específico, y quisiera ponerlo de la siguiente manera. Tomemos por ejemplo el tema de "el amor". Si nos ponemos a pensar qué se puede hablar del amor, nos encontrariamos que hay una infinidad de particularidades que nos llevarían varios sermones el desarrollar totalmente este tema. Pues estas particularidades serían los títulos, así: El amor de Dios, El amor de una madre, El amor fileos, El amor Agape, El amor Eros, El amor que no es amor, El verdadero amor, El amor de mi vida, y otros.

Simplifiquemos más la idea. Hace algunos meses durante un curso en mi casa sobre el sermón expositivo, un hermano muy amado, siendo un poco difícil de mi parte explicar más claramente la diferencia entre el tema y el título, me impacto la simplicidad que podía dársele por medio del ejemplo siguiente: Siendo el trabajador conocedor de fontanería, tuberías y chorros o grifos de agua, tomamos como ejemplo de el tema "los chorros" o "los grifos" de agua. Sobre esto por lo menos tres divisiones a tratar, a) los chorros de plástico, b) los chorros de metal y, c) los chorros de cerámica. Cada uno de estos es un aspecto específico, pero que trata sobre el mismo tema central, los chorros. Así, pongamos otro tema bíblico: La Salvación, es tan general que, tendríamos que usar otro tanto de sermones para poder agotar el tema, por ejemplo: La salvación se pierde o no, Quienes pueden salvarse, Por qué necesitamos de un salvador o La salvación por obras, y otros más. Creo que me he explicado ¿no?. No crean que me estoy burlando, es realmente serio el obstáculo con el que me he enfrentado en este punto, que en algunos grupos de homilética,
aquí es donde abandonan.

Las características del título son las siguientes:
  1. Específico.
  2. Concreto.
  3. Es una idea clave.
Comparemos con las del tema a continuación:
  1. General.
  2. Amplio,
  3. Contiene muchas ideas claves.
Con la fórmula (si le podemos llamar así) termino esta entrega, pues las siguientes nos llevaran a desarrollar cada uno de los elementos de esta fórmula para obtener el título de una porción:

TÍTULO = Tema +¿Por qué?, ¿Cómo?, Palabra clave o, Palabra ó Frase limitante.

Nos vemos al final de la semana para iniciar esta aventura de la predicación. Dios les bendiga y de sabiduría en toda palabra y ciencia.

[el tema] resolviendo la aarea


Resolvamos punto por punto, y veamos qué más podemos aportar para nuestro provecho en las lecciones.

Juan 15:1-8. 1 Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador.2 Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto.3 Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os he hablado.4 Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.5 Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.6 El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden.7 Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.8 En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos (VRV60).

Hay dos palabras que bien pueden ayudarnos a conocer el tema de la porción, teniendo en cuenta que esta es la intención del escritor: a) fruto, y b) permanencia. Estas juegan el papel principal dando la idea central de la porción. Bien, ¿por qué no 'la vid verdadera'? esta figura es central en la que gira la intención de la porción, tratando de atraer la atención, pero también el propósito de que veamos el fin último que ella provee, 'fruto' a través de la 'permanencia' (dependencia) a 'la vid verdadera' que es Cristo.

Esto lo complementaré más adelante (título y puntos principales), pero les doy un avance parcial de este título y sus puntos principales.

TEMA: La permanencia en Cristo.
TÍTULO: ¿Porqué necesitamos permanecer en Cristo?
PUNTOS PRINCIPALES:
1. Necesitamos permanecer en Cristo 'para poder llevar fruto'.
2.
Necesitamos permanecer en Cristo 'para no ser quitados de la vid'.
3.
Necesitamos permanecer en Cristo 'para ser sus discípulos'.
4. Necesitamos permanecer en Cristo 'para glorificar al Padre'.

Con esto, quiero mostrar que el tema, el título y los puntos principales llevan un mismo hilo de pensamiento, y desarrollan la intención de la porción. Fácil, ¿verdad?. Veamos el siguiente.

1 Corintios 2:6-10. 6 Sin embargo, hablamos sabiduría entre los que han alcanzado madurez; y sabiduría, no de este siglo, ni de los príncipes de este siglo, que perecen.7 Mas hablamos sabiduría de Dios en misterio, la sabiduría oculta, la cual Dios predestinó antes de los siglos para nuestra gloria,8 la que ninguno de los príncipes de este siglo conoció; porque si la hubieran conocido, nunca habrían crucificado al Señor de gloria.9 Antes bien, como está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han subido en corazón de hombre, Son las que Dios ha preparado para los que le aman. 10 Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios. (VRV60).

Correctamente respondido por ustedes, la mayoría, esta porción habla de 'la sabiduría de Dios', no es de mis preferidos para predicar todavía, pero expresa claramente que no está hablando de otra cosa sino de 'la sabiduría de Dios', toda la porción gira al rededor de este pensamiento.

TEMA: La sabiduría de Dios.
TÍTULO: Para quién es la sabiduría de Dios.
PUNTOS PRINCIPALES.
1. La sabiduría de Dios es 'para los que han alcanzado la madurez espiritual' (v. 6).
2.
La sabiduría de Dios es 'para los que aman a Dios' (v. 9).
3. La sabiduría de Dios es 'para los que tienen el Espíritu de Dios' (v. 10).

Espero sus opiniones en los comentarios, y sigo recalcando que esto no es rígido, y lo que escriba no es el absoluto, es mi percepción del pensamiento que la porción desarrolla, y que puede ser aplicado de la manera que Dios les ilumine.

Hasta pronto, y que Dios les bendiga en gran manera por su esfuerzo en seguir estos artículos lecciones. Mi más profundo respeto.

[el tema] [como descubrirlo?] 2da Parte

A veces, y no es broma, me he sentido en la situación de la foto arriba cuando busco el tema de una porción en especial. Pero mi propósito es que cada vez que nos enfrentemos a un dilema de búsqueda, pueda ser mas sencillo la próxima vez. Veamos pues...

Salmos 37:1-11. 1 No te impacientes a causa de los malignos,Ni tengas
envidia de los que hacen iniquidad. 2 Porque como hierba serán pronto cortados,Y
como la hierba verde se secarán. 3 Confía en Jehová, y haz el bien;Y habitarás
en la tierra, y te apacentarás de la verdad. 4 Deléitate asimismo en Jehová,Y él
te concederá las peticiones de tu corazón. 5 Encomienda a Jehová tu camino,Y
confía en él; y él hará. 6 Exhibirá tu justicia como la luz,Y tu derecho como el
mediodía. 7 Guarda silencio ante Jehová, y espera en él. No te alteres con motivo del que prospera en su camino, Por el hombre que hace maldades. 8 Deja la ira, y desecha el enojo; No te excites en manera alguna a hacer lo malo. 9 Porque los malignos serán destruidos, Pero los que esperan en Jehová, ellos heredarán la tierra. 10 Pues de aquí a poco no existirá el malo; Observarás su lugar, y no estará allí. 11 Pero los mansos heredarán la tierra,Y se recrearán con
abundancia de paz.

Iniciemos con este nuevo reto.
  1. Leamos toda la porción las veces que sea necesaria hasta que el sentido y pensamiento del escritor se revele claramente (oración mis hermanos, oración...). La versión Dios Habla Hoy (DHH) muestra la palabra "confía" por lo menos en tres ocasiones, y ayuda dirigir un poco la dirección del pensamiento del escritor. Sólo por aclaración, hay que recordar que los Salmos, aunque son inspirados, son expresiones de los escritores al conocer a Dios en momentos de su vida. Así, expresan lo que conocieron de Dios, no tanto lo que Dios dijo acerca de Él, pero que fue mostrado de la manera más clara para que sepamos que también podemos conocerlo de la misma manera.
  2. He marcado en negrillas palabras y frases que forman una unidad de intención de acuerdo al pensamiento de la porción. Son recomendaciones del escritor acerca del Dios que ha conocido, pero que van enmarcados sólo si podemos confiar en Él, sino, no habrá ninguna diferencia entre los malvados y nosotros.
  3. Analizo por separado la unidades de la porción más pequeños, para ver qué quieren decir por separado... Qué raro, acabo de revisar el título que le asignan a la porción, y es de la confianza. Con toda honestidad, no me había fijado. Pero bien, no siempre será así, se los garantizo.
  4. Concluyo pues, observando que todo gira no sólo en las palabras, sino en la intención de Dios de mostrar un aspecto de su carácter. Habla acerca de la impaciencia, la paciencia, la confianza como aspectos que nosotros podemos manifestarle a Dios. Atención con esto, todas estas manifestaciones mostradas son lo que el hombre observa y reacciona a esto hacia Dios. Creo que aunque todo gira al rededor de la paciencia, hay un elemento que Dios realmente premia en nosotros... que confiemos en Él. Esto nos hará pacientes, evitará que formemos juicios equivocados, tomar decisiones o caminos erróneos, y que hallemos el verdadero camino de Dios, esperar en el, que sólo se logrará confiando en aquel que conoce el camino.
Se estarán preguntando entonces, ¿por qué tiene como tema, en la penúltima entrega, la paciencia? Porque no se los voy a dar todo fácil sin que hagan un esfuerzo. No les he mentido. Pero esta porción a mi parecer está más orientada a mostrar la confianza en Dios más que la paciencia del hombre. Pero pueden usarla como mejor les parezca en sus sermones, aplicándola en un buen contexto.

Me disculpo por el tiempo que he dejado pasara para volver a escribir, pero he tenido dos semanas difíciles, pues a mi hijo le dio varicela, leve, pero que luego se complicó con sinusitis y bronquitis viral, mi esposa ha estado conmigo y yo con ella. Pero espero que estos espacios sin escribir en el blog sean menos frecuentes.

A ver que les tengo para la próxima con Mateo 2:1-12. Y les invito a escribir sus comentarios bajo este artículo lección, para que otros puedan compartir de ellos. Gracias por los correos enviados contestando la tarea. Sigan adelante. Dios les bendiga.